Por qué septiembre en Barcelona todavía puede ponerte en riesgo de deshidratación
- Stefan Botnar
- 5 sept
- 4 Min. de lectura

Barcelona en septiembre tiene un encanto especial. La ciudad está más tranquila que en agosto, pero sigue llena de vida con festivales, turistas de final de verano y un clima cálido que se alarga hasta el otoño. Muchos visitantes internacionales creen que lo peor del calor ya ha pasado, pero esta es una peligrosa idea equivocada.
Cada año atiendo a viajeros, familias con niños, profesionales de negocios en congresos, turistas solitarios, que llegan a mi consulta con cuadros graves de deshidratación. A menudo no son conscientes de lo serio que es su estado hasta que aparece el mareo, el desmayo o incluso la necesidad de hospitalización.
Este artículo explica por qué la deshidratación es tan frecuente en septiembre en Barcelona, cómo reconocer las señales tempranas y qué hacer para protegerte durante tu estancia.
Por qué el clima de septiembre en Barcelona puede engañar
A primera vista, septiembre parece más fresco que agosto. Las noches son agradables y las calles menos abarrotadas. Sin embargo, las temperaturas diurnas alcanzan con facilidad 28–30 ºC y la humedad supera a menudo el 70%.
Esto genera una falsa sensación de seguridad:
Los turistas pasan el día entero caminando o en la playa.
El consumo de alcohol aumenta en terrazas y azoteas.
El aire acondicionado de los hoteles seca el cuerpo aún más por la noche.
En julio y agosto la gente se prepara mentalmente para el calor extremo; en septiembre muchos bajan la guardia y se olvidan de las precauciones básicas.
Cómo se desarrolla la deshidratación (y por qué es peligrosa)
La deshidratación aparece cuando el cuerpo pierde más líquidos de los que recibe. En Barcelona esto puede suceder rápidamente debido a:
Calor y sudoración: incluso un paseo suave provoca pérdidas de agua.
Alcohol y cafeína: aumentan la producción de orina.
Viajes en avión: reducen la hidratación antes de llegar.
Confusión de síntomas: los visitantes atribuyen el malestar al jet lag o al cansancio.
Si no se corrige a tiempo, la deshidratación puede provocar:
Calambres musculares y náuseas
Hipotensión y mareos
Confusión o desorientación
Golpe de calor, que puede poner en riesgo la vida
Señales tempranas que no debes ignorar
Sequedad de boca y labios
Dolor de cabeza o mareo
Orina oscura o menos frecuente
Cansancio o irritabilidad
Síntomas graves que requieren atención médica inmediata:
Confusión, dificultad para hablar o desorientación
Pulso rápido, presión arterial baja
Desmayo
Incapacidad para retener líquidos
Quiénes son más vulnerables
Niños: pierden líquidos más rápido.
Adultos mayores: tienen menor reserva de agua y menos sensación de sed.
Personas con enfermedades crónicas: diabetes, problemas renales o cardíacos.
Viajeros de congresos: largas jornadas sin descanso ni hidratación suficiente.
10 consejos prácticos para evitar la deshidratación en Barcelona
Lleva siempre una botella reutilizable.
Bebe sorbos pequeños con frecuencia.
Alterna alcohol con agua.
Reduce el exceso de café y bebidas energéticas.
Come frutas, ensaladas y gazpacho.
Evita el sol directo entre las 12h y las 16h.
Usa ropa ligera de algodón o lino.
Protege tu cabeza con sombrero y usa protector solar.
Descansa en lugares frescos o con aire acondicionado.
Escucha a tu cuerpo: no ignores mareos ni cansancio extremo.
Qué hacer si te sientes mal
Busca un lugar fresco y con sombra.
Bebe agua poco a poco o sueros de farmacia.
Evita alcohol, café o refrescos azucarados.
Descansa hasta que los síntomas mejoren.
Acude al médico sin demora si:
No puedes retener líquidos.
Te desmayas o te confundes.
Los síntomas empeoran pese a hidratarte.
Preguntas frecuentes sobre la deshidratación en Barcelona
¿Se puede beber agua del grifo en Barcelona? Sí, es potable, aunque a algunos turistas no les gusta su sabor.
¿Sirven las bebidas deportivas? Son útiles tras mucho sudor o vómitos, pero en la mayoría de casos basta con agua.
¿El jet lag puede confundirse con deshidratación? Sí, porque ambos provocan fatiga, dolor de cabeza e irritabilidad.
¿Las farmacias ayudan en casos leves? Sí, pueden ofrecer sobres de rehidratación oral. Para síntomas moderados o graves, consulta médica inmediata.
Conclusión: Más vale prevenir que curar.
Barcelona en septiembre es una maravilla para visitar. Pero no subestimes el calor tardío ni la humedad. Con precauciones sencillas y atención temprana puedes evitar problemas y disfrutar de tu viaje con seguridad.
Sobre el autor
Dr. Stefan Botnar, MD – Médico de habla inglesa en Barcelona para turistas El Dr. Stefan Botnar es médico especialista en medicina interna y salud pública, con más de 15 años de experiencia. Atiende a pacientes internacionales de forma rápida y privada, especializado en prevención, metabolismo, problemas relacionados con los viajes y, especialmente, diagnóstico y tratamiento de ITS/ETS. Su clínica ofrece consultas presenciales y por telemedicina, vacunación, asesoramiento nutricional y atención a urgencias menores (fiebre, gastroenteritis, reacciones alérgicas).
Habla inglés, español, ruso, rumano y alemán, garantizando una comunicación clara con pacientes de todo el mundo.
Aviso legal: Este artículo es únicamente informativo y no sustituye la consulta médica. Ante síntomas persistentes o que empeoren, acude siempre a un profesional sanitario.
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